No me puedo resistir a escribir
este post al que llevaba dándole vueltas ya hace algún tiempo, y que tras los
últimos acontecimientos se ha reavivado en mi cabeza.
Estos
últimos días tras la no elección de Madrid 2020 como sede para la celebración
de los juegos olímpicos, se ha oído hablar mucho de la calidad de nuestros
políticos y representantes fuera de nuestras fronteras, esto no es nuevo, viene
ya desde hace bastante tiempo atrás, todos somos conscientes de la formación /
cualificación que nos exigen para ocupar un puesto de trabajo en cualquier
empresa privada / publica (aunque en algunos puestos públicos podemos suprimir
dicha cualificación por grado de parentesco o afinidad con la persona encargada
de asignar el puesto.... ) pero no es la formación o más bien deformación de
nuestros representantes lo que quiero dejar de manifiesto en este post.
Todos sabemos la patética imagen que tiene España dentro de
nuestras fronteras, (caso gurtel, caso Noos, operación malaya, caso Bárcenas,
operación Puerto, Madrid Arena....) todos eximiendo responsabilidades, como si
no fuera con ellos... pero lo peor de todo es que a la población ya no nos
sorprende nada, ¿Porque? porque somos espectadores en una pista de circo, donde
cada vez hay mas payasos que no hacen gracia y menos domadores con látigo firme.
No nos sorprende haber sido oyentes de tan míticas
dicciones:
-"Si la borrasca cambió de forma impredecible, no las
pueden predecir, y si no la predicen quienes la tienen que predecir, ¿cómo
quieren ustedes que lo vayamos a predecir aquellos que estamos esperando la predicción?" (Magdalena Álvarez)
-"la situación actual no se considera una crisis, sino un periodo de desaceleración económica" (J. Luis Rodríguez
Zapatero)
-"Todo es mentira excepto algunas cosas que son verdad" (Mariano Rajoy)
-"A relaxing cup of café con leche" (Ana Botella)
Con esto no quiero decir que yo lo haga mejor, ni que
cualquiera sepa hacerlo, lo único que pido es que se exija una cualificación
para desempeñar determinadas funciones u ocupar determinados puestos, y más aun
en este caso en el que el destino y vidas de tanta gente están en sus manos,
por lo menos que no nos quede esa sensación de impotencia, en la que poco
podemos hacer, o decir, salvo escribir post como este donde liberar la
indignación personal y decepción por nuestros representantes (sean rojos
verdes, amarillos o azules...) y si alguien no sirve para ejercer determinado
puesto por carencias formativas, pues siempre habrá otras ocupaciones que
puedan desempeñar y que cuesten mas baratos a la población, ya no hablo solo en
términos económicos, sino a nivel de imagen...
Ahora también somos conscientes de la imagen que tiene de
nosotros fuera de España
¡ESPAÑA, PAÍS DE PANDERETA!
No nos extrañan titulares como:
- ........
Por todo esto, la marca España
ha sufrido una degradación que no somos capaces de asumir, atrás quedaron
siglos de esplendor en los que todo el mundo envidiaba
nuestras gestas, y la palabra español era envidiada, temida y respetada ,....¿Dónde perdimos esa grandeza? Mi respuesta a esta
pregunta, es que perdimos honor y nobleza al mismo tiempo y con la misma
rapidez que perdimos la vergüenza....
Y después de todo, ¿Que
esperamos? ¿Que nos adjudiquen la organización de unos juegos olímpicos?.....Sería lo
de menos organizarlos, pero cuando alguien tiene la sensación que no sabemos
organizarnos ni nosotros mismos, que la palabra corrupción está en 3 de cada 4
noticias relacionadas con España, y nuestra credibilidad se basa en mentiras y
mas mentiras... es lógico y normal que nos vaya como nos va. Y por mucho empeño
que pongan nuestros héroes o conquistadores actuales (Rafael Nadal, Mireia
Belmonte, Selección de Fútbol, Baloncesto,Balonmano....) en levantar dicha imagen, puedo
asegurar y a la vista está, que es mayor el desprestigio sufrido gracias a
nuestros representantes fuera de aquí (¡De vergüenza!)
¡¡¡YA
NADIE NOS COMPRA!!!
Interesante post.... aunque mas allá de lo que cuentas -que comparto en su mayoría- echo de menos alguna reflexión sobre que ademas... ¡vamos prepotentes por el mundo! Y a algunos - o a bastantes ya- empezamos a hacerles gracia o a darles pena......
ResponderEliminarA mí lo que más me gusta de nuestros queridos políticos, es lo preparado que están para sus los puestos que desempeñan. Si un ministros le asignan un ministerio concreto, lo mínimo es que tenga estudios que cualifiquen, que efectivamente puede desempeñar el cargo asignado, y visto lo visto, son asignados a dedo y a esperar que sean aconsejados y paga a otra persona para que haga el trabajo de un ministro? En fin.. Por mucho que hagan nuestros deportistas, siempre quedan a la sombra de situación del país.
ResponderEliminarNos rasgamos las vestiduras porque nuestros políticos no dan la talla. Pues la democracia es eso, que cada 4 años los puedes cambiar, pero para ello hay leerse los programas políticos y acudir a la urnas. La democracia tiene sus defectos y sus grandes virtudes. Si les exigimos una preparación específica, debemos de crear unas oposiciones con un temario en concreto y exigir una cualificación académica.¿ quienes formarían el tribunal de opositores? Que raro que siendo andaluz se te olvide, los ERE, el caso mercasevilla y el vandalismo de SAT. Un cordial saludo
ResponderEliminarCreo que el tema "democracia" en España, daría para otro post. Lo único que podemos votar cada 4 años es a un partido político, compuesto por una serie de personas cuyos méritos son en ocasiones desconocidos por inexistentes y a un programa que en ningún caso es vinculante tras la elección.
ResponderEliminarPero lo increíble de todo esto, no es contar con unos políticos que se intercambian la cartera como quien cambia de chaqueta, lo verdaderamente increíble es que todo pase ante la mirada pasiva o algo acostumbrada de los ciudadanos.
Según la Constitución, el poder reside en el pueblo pero no tenemos o al menos no conocemos ningún medio para exigir a un político que dimita si su gestión es ineficiente, si no se le considera apto para el puesto, si incumple su programa o si derrocha nuestro dinero en fines personales. Y esto es lo realmente triste. Estamos indefensos.